sábado, 6 de octubre de 2007

Día 24 - El Fin

Viajábamos de vuelta a las 15 hs., así que teníamos toda la mañana... pero hicimos fiaca. Dormimos, charlamos con los chicos, armamos los bolsos... y al aeropuerto.

Desgraciadamente se terminaba nuestra estadía Europea, así que subimos al avión con la tristeza del viaje terminado pero con la alegría de haber recorrido y andando por lugares realmente fabulosos... y con la esperanza de volver algún día.

viernes, 5 de octubre de 2007

Día 23 - Toledo

Como ya en Madrid no teníamos mucho más para visitar, decidimos pasar el día en Toledo, que es una ciudad qué está a unos 70 km.

Nos despertamos bastante tarde y ya no había más lugar en el tren, así que corriendo, conseguimos un par de lugares en omnibus y hacia allí fuimos.

El sector de la ciudad que se encuentra dentro del fuerte es realmente muy extraña. Con calles muy finas en donde apenas si pasa un auto (ver foto) y una gran variedad de iglesias, templos y mezquitas por todos lados. Todo muy bien conservado y preparado para el turismo... hasta demasiado. Recorrimos, sacamos fotos, compramos mazapan (supuestamente originario de aquí) y nos volvimos.

Llegamos por la noche a la casa de los chicos, nos preparamos, pasamos nuevamente por la plaza de Toros, ya que ellos no la conocian (viviendo allí hace como un año) y nos fuimos a una marisquería a festejar ambos cumpleños (el de Lorena y el de Teresita).

jueves, 4 de octubre de 2007

Día 22 - Nuevamente en Madrid

El día del cumple de Lore comenzó arriba del Tren en viaje París-Madrid.

Llegamos por la mañana y dejamos los bolsos en la estación de Chamartín, ya que los chicos que nos iban a hospedar estaban laburando. Allí vivimos nuevamente la inseguridad Europea (tanto que hablan de la Argentina !!!) ya que le robaron la billetera en el hall de la estación a una turista sueca. Luego a recorrer nuevamente Madrid.

Encaramos para Plaza Mayor a comer algo y de ahí al Museo Nacional Reina Sofia. Realmente es uno de los que más nos gustó, ya que no es tan grande y ver la obras de Picasso, Dalí y Miró (con el Guernica incluído) es realmente muy impactante. Este es un cuadro digno de ver... y no La Gioconda, que ya por su tamaño te desilusiona un poco...


De ahí nos fuimos a Puerta del Sol a encontrarnos con una ex-compañera de trabajo (Gisella) que está laburando en Madrid. Nos llevo, cual guía turística, a la Plaza de Toros "Las Ventas" (foto), que tiene capacidad para 25.000 espectadores y está considerada una de las más importantes del mundo. Lástima que las visitas para entrar eran sólo por la mañana.

Seguimos caminando y recorrimos la avenida Alcalá chusmeando negocios y precios, mucho más accesibles que en el centro de Madrid.

Por la noche, la idea era salir "de tapas" para festejar el cumple de Lore, pero entre el horario y que un día después cumplía también Teresita (quien nos hospedaba) lo dejamos para el día siguiente y festejamos los dos cumpleaños juntos.

miércoles, 3 de octubre de 2007

Día 21 - Museo del Louvre

Por supuesto, debíamos volver a conocer y subir a la Torre Eiffel, está vez de día, así que para allí encaramos. A Lore le dio un poco de impresión verla tan alta y tan imponente de día que, como ya había subido de noche, me esperó abajo y subí solo. A ella mucho las alturas no le gustan y a mi me encantan... por mi viviría arriba de la torre Eiffel (aunque el restaurante "Julio Verne" es un poco caro...) La verdad que desde el último piso todo se ve muy chiquito y da un poco de vértigo, pero ralmente vale la pena (y vale con creces los 12,50 Euros que hay que gatillar para subir)

De ahí fuimos a otros de los puntos imprescindibles si de París se trata, que es el Museo del Louvre. Por suerte no tuvimos que hacer mucha cola para entrar, cosa que a esta altura del viaje ya me iba a molestar un poco y entramos. Cometimos el error de no comer antes, con lo que ya eran tipo 14 hs. y estabamos bastante hambrientos.... Como de esculturas, pinturas, bustos y antiguedades varias ya teniamos bastantes le dije: -Vamos directo a La Gioconda, sacamos unas fotos y nos vamos a comer por ahí. Y mas o menos así hicimos... Nos cruzamos de casualidad con la Venus de Milo (nos dimos cuenta por los 500 japoneses que la rodeaban) y salimos para poder comer unos ricos panninis.

Luego nos tomamos el Metro (habiamos sacado el pase diario ilimitado) y nos fuimos para la zona de la Opera. Recorrimos dicho barrio y entramos a las famosas Galerias Lafayette. Es un inmenso comercio de 9 pisos. Los precios todos muy salados, aunque había ofertas realmente convenientes.

Ya de noche, volvimos al hotel a agarrar los bolsos ya que esa misma noche volviamos en tren nocturno a Madrid para terminar la vuelta y, desgraciadamente, nuestro viaje.

martes, 2 de octubre de 2007

Día 20 - Notre Dame y Sacre Coeur

Hoy nos dedicamos a caminar sus barrios y entrar a sus iglesias.

Lo primero que encaramos fue para la Catedral de Notre Dame... simplemente porque nos pareció lo más conocido y porque en el mapa se veía que estaba en una isla en el medio del Sena (isla de La Cité), lo cual nos pareció llamativo. El día no estaba de lo mejor, como se puede apreciar en la foto, pero por lo menos nos dejaba caminar y sacar alguna que otra foto (gris, por supuesto).

De ahí fuimos a la Sainte-Chapelle (Santa Capilla) que, a pesar de ya haber viso infinidad de templos religiosos, Lore insitió para entrar a pesar de los 6 Euros de la entrada (única iglesia que nos cobró entrada en todo nuestro recorrido). Fue sola y, según ella, valió la pena.

De allí seguimos la caminata al famoso Barrio Latino (muchos jóvenes, mucha gente en la calle, comida al paso, librerias llenas, etc.), pasamos por la Sorbona, el Panteón de París (simil al Romano), el Centro Pompidou y metro (subte) para el barrio de Montmarte (realmente hermso subir la colina por sus calles angostas) hasta llegar a la Basílica de Sacre Coeur desde donde se tiene una panorámica estupenda de una gran parte de París.

Ya de noche, fuimos para la zona del Museo del Louvre que nos habían comentando que iluminado era muy lindo para caminar. Por supuesto, foto obligada en la pirámide más conocida por "El código Da Vinci" que por el museo.

lunes, 1 de octubre de 2007

Día 19 - Versalles y Arco del Triunfo

Ante las primeras luces del día, rogamos para que el clima haya mejorado un poco.... no veiamos mucho el sol pero por lo menos no llovía, así que ya era bastante.

El día anterior habíamos averiguado todo para ir al Palacio de Versalles. Uno había escuchado (gracias Dolina) y leído (gracias Dolina, nuevamente) tantas historias de "los Luises" que realmente tenía una gran ansiedad de ir a conocer los aposentos en donde se escribió una parte de la historia de Francia (supongo que la más divertida).

Luego de una horita en tren llegamos. Realmente enormes los jardines y majestuoso todo el interior de los palacios. Se nota que se gastaron toda la guita del momento para construir y mantener esto. Para que se den una idea, el palacio de Versalles cuenta con 700 estancias, 2.513 ventanas, 55 estanques, 352 chimeneas (1.252 durante el Antiguo Régimen), 67 escaleras, 483 espejos, y 13 hectáreas de chimeneas. La superficie total es de 67.121 m² de los cuales 50.000 están abiertos al público.

Bastante agotados por semejante inmensidad, volvimos al centro de París para bañarnos e ir para el Arco del Triunfo, ya que nos encontrabamos ahí con un amigo (Daniel) que está viviendo en Europa hace varios años. Luego de un par de horas de espera abajo y arriba del arco (muy buena la panorámica, ya que desde ahí confluyen 12 avenidas), y de sacar como 100 fotos desde todos los angulos posibles nos dimos por vencido y seguimos nuestro paseo por los Champs-Elysées. Luego nos enteraríamos que tuvo problemas con el pasaporte y no pudo viajar.

Seguimos recorriendo París de noche y su famosa avenida y encaramos al hotel a descansar un poco.

domingo, 30 de septiembre de 2007

Día 18 - Al fin, viaje a París

Al fin ibamos a conocer París. A pesar de toda la mística que posee dicha ciudad, nuestra preocupación más urgente era ver el partido por el accesso a la semifinal del mundial de Rugby entre Los Pumas e Irlanda que se jugaba en esta misma ciudad.

Habíamos averiguado por Internet para ir al estadio a verlo, pero los precios de los lugares que quedaban disponibles eran inaccesibles. Por suerte la habitación del hotel tenía TV así que lo vimos cómodos desde allí. Ganamos y del bar de abajo se escuchaban las quejas de los irlandeses (descalificados) y de los franceses (por dicho triunfo, debían jugar con los All Blacks).

Felices por el resultado del encuentro, comenzamos nuestro recorrido por "la ciudad luz". Lógicamente, enfilamos derecho para la Torre Eiffel, ya que nos quedaba a unas 20 cuadras del hotel.

Montparnasse, Los Inválidos (donde está el cuerpo de Napoleón Bonaparte) y por fin apareció la torre. Inmensa y avasallante. Como ya era de noche, estaba toda iluminada. Realmente imponente. Encima a cada hora se prenden, por espacio de 10 minutos, muchas lucesitas blancas intermitentemente que le dan más espectacularidad a la ya muy iluminada torre. Subimos hasta el segundo nivel y pudimos apreciar a París desde las alturas con sus millones de luces.

A la vuelta pasamos por una carpa enorme en donde se juntaban los hinchas que volvían del estadio luego de cada partido. Tocaban bandas en vivo y se vendía mucha, pero mucha cerveza. La mayoría eran irlandeses, y a pesar de la derrota, chupaban y cantaban como si hubiesen ganados. Los argentinos, que también había bastantes, gritaban por los pumas e intercambiaban camisestas con los irlandeses para llevarselas de recuerdo. Nosotros no tomamos nada (no por abstemios sino por tacaños), dimos unas vueltas y nos fuimos a dormir, con el objetivo de levantarnos temprano a seguir recorriendo tan famosa ciudad.

sábado, 29 de septiembre de 2007

Día 17 - Fria y pintoresca Berna


Ya en Berna, una de las opciones para pasar el día era ir a Interlaken, que es un pueblito en el medio de los Alpes Suizos en donde se hace ski en invierno. Averiguamos y era bastante viaje para un día solo así que decidimos quedarnos y recorrer la ciudad.

Al no ser muy grande, hicimos un circuito caminando pasando por los puntos turísticos más importantes (Torre del Reloj, Catedral, el Palacio Federal, la casa de Einstein, los osos, etc.)

Nos pareció todo muy "suizo" tal como lo imaginamos. Todo ordenadito, prolijo, muchas flores en balcones y plazas, gente fria y sin mucha onda pero cordiales, idioma inentendible, etc.

Suiza no pertenece a la Unión Europea, y por ello no se manejan con Euros, sino con Francos Suizos. Al no llevar calculadora, fueron un par de días complicados con las multiplicaciones y los precios... con decir que nos habían dicho que Suiza era el país más caro de Europa, y al estar el Franco Suizo más devaluado que el Euro, nos pareció que era el más barato y allí compramos la mayoría de regalos y recuerdos.

Nos queda la sensación de que alguna cuenta habremos hecho mal, aunque la hicimos mil veces y todavía pensamos que compramos bien.

viernes, 28 de septiembre de 2007

Día 16 - A Suiza via Milán


Como no había un tren directo de Florencia a Berna (nuestro próximo destino) la idea fue salir temprano vía Milán, quedarnos allí cinco horas conociéndola y luego hacer Milan-Berna.

El objetivo principal era subir a la majestuosa Catedral de Milán. Es la tercera más grande en el mundo después de San Pietro en Roma y de la Catedral de Sevilla. Está hecha totalamente de mármol, con inmensas estatuas, arcos y columnas. Las estatuas son unas 3500, incluídas las 96 gárgolas. El pináculo más alto tiene una altura de 108 metros, y tiene en su parte superior la estatua de la Virgen María, mejor conocida como la “Madonnina”, revestida de oro..
En su enorme terraza se repitió una escena de casi todo el viaje... mientras yo sacaba fotos, Lore aprovechaba y se dormía una siestita de 10 o 15 minutos al sol. (foto)

Luego fuimos a visitar el "Castillo Sforza" (foto), caminamos por la Galería Vittorio Emanuele II (similar a la calle Florida pero techada con una cupula de vidrio) y recorrimos los negocios de ropa más caros del mundo. Toda la moda a la orden del día.

Por la noche llegamos a Berna. La idea de no hacer el viaje directo fue buena, hasta que nos encontramos en una ciudad con sus nombres de calles y carteles ininteligibles, con poca gente en la calle por el horario y con un muy modesto mapita de la zona del hotel. Yo sabía que no estabamos lejos, pero se nos hizo muy difícil entender los pocos carteles que ibamos encontrando.
Luego de un par de cuadras, ya totalmente perdidos, se nos apiadó un hombre que por suerte hablaba inglés y nos indicó, medio a los tumbos, cómo llegar a la calle Wyttenbachstrasse (vaya uno a saber cómo corno se pronuncia !!)

Al rato y bastante cansados, llegamos.

Con la emoción de haber encontrado el hotel, le queríamos comentar dicha hazaña a la recepcionista, pero era más fria y distante que el Polo Norte. Solo cruzamos un "Hellou" y un "Room 509", "Thanks". Lógico, veniamos de Italia y pasamos a Suiza. Un mundo totalmente distinto.

jueves, 27 de septiembre de 2007

Día 15 - Último día en Florencia

Descansamos por la mañana y nos dirigimos en bus a Plaza Michelangelo (está sobre un cerro), y desde allí pudimos divisar toda Florencia junto a una de las copias del David, de Miguel Angel, que pareciera que contempla la ciudad desde arriba.

Luego, nuevamente al centro bordeando el Arno. Allí admiramos la majestuosa catedral gótica de Santa María de Fiore (El Duomo) realizada en marmol verde, rosa y blanco. El Batisterio, la Plaza de la Señoría, con todas sus esculturas al aire libre, el enorme Palacio Pitti, etc.

Paso obligado, las Gelatterias. Dicen por ahí que en Florencia están los helados más ricos, aunque nosotros, tal vez por acostumbramiento, tal vez porque no tuvimos suerte en la heladería que elegimos, no podemos decir lo mismo. Nos seguimos quedando con "Munchis" o "La abuela Goye", en Baires.

miércoles, 26 de septiembre de 2007

Día 14 - Venecia, con más agua que de costumbre


Ese día estaba reservado para conocer Venecia. Ida y vuelta en el día desde Florencia.

Antes de comenzar el viaje habíamos comentado entre nosotros que si nos llovía algún día, esperabamos que no sea justo este, ya que era la única ciudad en donde ibamos sólo un par de horas. Dicho y no hecho. En el viaje a Venecia (3 horas de tren) comenzó el diluvio y los truenos. Para cuando llegamos, Venecia estaba totalmente inundada.

Por suerte al rato paró y, esquivando charcos, pudimos caminar sus calles (ríos, en este caso).

Esta ciudad es realmente extraña. Nos habían comentado que ir caminando desde la estación de tren a Piazza San Marco sin perderse era imposible. Lo intentamos (no perdernos) pero, lógicamente, no lo conseguimos. A lo terriblemente intrincado de sus calles y puentes y ríos y pasadizos, había que sumarle que muchos lugares estaban anegados y que no había tantos aventureros caminando bajo la lluvia.

Por suerte, luego de unas vueltas, un gentil veneciano nos acompañó un par de puentes (lease cuadras en una ciudad normal) y pudimos llegar a destino.

Allí recorrimos los lugares turísticos típicos (Piazza y Basílica de San Marco, Rialto, puente de los Suspiros, etc.) y vuelta en vaporetto por el Canal Grande (que es como pasear en gondola pero más barato, un poco mas apretados y si el tano que te canta).

martes, 25 de septiembre de 2007

Día 13 - Florencia: ciudad artística

En el mismo momento que llegamos a Florencia, ya nos dimos cuenta que era una bella ciudad. Cuidada en todos sus detalles y con esculturas en todas sus esquinas. Sus casas tienen una arquitectura similar y de variados colores.

El hotel (tipo Hostel) estaba del otro lado del Arno. Preguntamos y, aunque yo sabía que no, nos dijeron que era bastante lejos, así que nos tomamos un colectivo que, aunque quisimos, no funcionaba la máquina para fichar el boleto, y cuando en el medio del recorrido comenzó a funcionar, bien de Argento, no lo fichamos, así que nos servía para otro viaje (también de Argento, al final no lo usamos y todavía lo tenemos sin fichar, ja, ja, ja) Finalmente eran unas 15 cuadras como mucho desde la estación, así que ni siquiera era necesario tomar el colectivo.

Al ser más chica que Roma, el tránsito no es tan caótico, con lo que caminar por sus calles es un poco más fácil y agradable.

Dimos un par de vueltas y nos quedamos hasta tarde en el Ponte Vechio a escuchar a un simil Leon Gieco pero cantando en italiano.

lunes, 24 de septiembre de 2007

Día 12 - Habemus Papa

Por la mañana, Vaticano. 2 horas de cola bajo el sol. Finalmente pudimos decir que vale la pena.

El museo es enorme y hay que ir seleccionando las salas a visitar (persa, etrusca, egipcia, griega, etc.) Todas son muy grandes y completas. Muchos años de historia en un solo edificio.

Al rato de andar se llega a lo mejor: La capilla sixtina. Es muy impactante ver ahí lo que uno siempre vió en libros o en documentales ("La creación de Adán", "El Juicio Final", etc). Y además para nosotros también fue divertido, ya que nuestro juego consistía en intentar sacar fotos evitando los retos e insultos de los tanos de seguridad, ya que está prohibido. Nos fuimos conformes con algunas buenas fotos que pueden ver en el blog.

Luego de un descando (al cuerpo y a la vista) entramos a la basílica de San Pedro (otra iglesia más, y van...) Al papa no lo vimos.

Ya saliendo del Vaticano fuimos a Piazza di Spagna e hicimos allí un recorrido por las tiendas (negocios) más famosas del mundo (Armani, Versace, Valentino, Lois Vuiton, etc.) Ahí le dije a Lore que le compraba una billetera que vi en LV a 1300 Euros. Por suerte no le gustó (ja, ja, ja)

domingo, 23 de septiembre de 2007

Día 11 - Roma Ciudad


Este día la idea era recorrer sus calles y costumbres.

La primera gran diferencia que notamos es la manera de conducir entre España/Francia e Italia, a pesar de estar tan cerca. Es totalmente lo contrario. Alla, apenas te disponías a cruzar la calle por la senda peatonal los autos paraban automáticamente. El peatón tiene prioridad absoluta.

En Roma el tráfico es caótico y desordenado. Hasta más que en Buenos Aires. Para cruzar una calle hay que poner los 5 sentidos en marcha y tomar coraje. Al llegar a la otra vereda, luego de esquivar motos, autos, tranvías, buses, etc., uno siente realmente que ha realizado una hazaña.

Hay millones de motos tipo scooters (Vespas con parabrisas) que van en todos los sentidos y a toda velocidad. Es una experiencia cruzar hasta para dos porteños como nosotros, que deberíamos estar acostumbrados.

Otra particularidad romanesca (aunque aca ellos no son los culpables) es la cantidad de turistas. Parecen hormigas, ya que hay por todos lados y se chocan (nos chocamos) unos a otros. Todos por las calles mirando los mapitas... es todo un espectáculo.

Luego, recorridos tipicos: Fontana di Trevi, el Panteón, Plaza Navona, Campo di Fiori, 3 millones de iglesias, etc.

sábado, 22 de septiembre de 2007

Día 10 - Roma histórica


Pasar de las Ferraris de Montecarlo a Roma Termini (estación principal de tren en zona tipo Once o Constitución) es un poco chocante. Por suerte, luego de instalarnos y recorrer sus calles y su historia rápidamente nos cautivó.

Las visitas principales este día fueron el Coliseo Romano (impresionante) y la zona del Foro Romano. Muchos años de historia juntos en 500 metros cuadrados. Y pensar que no sólo allí hay ruinas del gran imperio romano sino debajo de cada una de las casas y calles por las cuales caminamos. Todos los días hacen un pozo para arreglar un bache y encuentras pedazos de templos con 2.000 años de historia... por ello allí se va redescubriendo el pasado todos los días.

En Roma dormimos en un lugar que era tipo alquiler de departamento, ya que el primer día pagamos y nos dieron la llave de la habitación, llave del departamento en un 5 piso y la llave de la puerta de entrada del edificio. Algo muy independiente. Lo bueno que teníamos una cocina (compartida, pero no había mucha gente) en donde dejaban todas las mañanas leche, café, facturas, etc.

viernes, 21 de septiembre de 2007

Día 9 - Nice Ville

El día que recorrimos Niza de noche habíamos visto que al finalizar las playas había un cerro (tipo morro brasilero) el cual tenía escaleras y una gran fuente arriba.

Subimos y desde allí observamos una gran vista panorámica de toda la ciudad, las playas y el aeropuerto, que tiene la particularidad de estar en el mar, al que se accede por una puente.

De allí fuimos hacie la parte antigua de Niza. Y a cambiarnos para un chapuzón en la última ciudad con playa en la que ibamos a estar.

Como los baños públicos de las playas (en los cuales habíamos pagado 0,50 euros cada uno para poder ponernos la malla) estaban ya cerrados y debíamos cambiarnos para tomarnos el tren nocturno a Roma, fuimos al viejo y querido McDonald en donde, se suponía, siempre podes entrar al baño. Oh sorpresa, las puertas de los baños estaban cerradas y con un pequeño teclado. Al preguntar, nos dijeron que debíamos ingresar el número de ticket de compra para poder utilizarlos. Entre frustrados y sorprendidos volvimos al hotel en donde habíamos dormido y al fin pudimos cambiarnos y salir en el tren nocturno para Roma.



Este viaje no fue en literas, ya que al momento de reservarlas ya no había, así que viajamos en unos compartimentos con seis asientos reclinables. Nos tocó con cuatro francesas que no paraban de hablar. Ya pensabamos que ibamos a dormir poco e incómodos.... pero por iluminación divina, ellas encontraron otro lugar similar pero sin nadie y se fueron, con lo que nos quedó todo el lugar para nosotros.

Realmente tuvimos mucha suerte y pudimos descansar sin problemas.

jueves, 20 de septiembre de 2007

Día 8 - Mónaco: Glamour y Dinero

Llegamos al principado de Mónaco con un sol radiante. Perfecto para aprovechar sus playas pero no tanto para caminar sus calles.

Primero fuimos al Palacio del Príncipe que se encuentra subiendo una gran escalera, con lo que ofrece una hermosa vista de Mónaco desde arriba.

Luego nos dirigimos al punto más famoso y filmado en la historia del Cine Europeo, que es el casino de MonteCarlo y sus lujosos autos estacionados en la puerta (igual, como verán, esa Lamborguini mucho no me gusta, ya que me queda un poco chica, ja, ja, ja)

Mientras recorriamos y nos dirigiamos hacia las playas, pasamos por una exposición de yates acordes al nivel del principado. Todo muy sorprendente para un par de argentos.

Paso siguiente, y luego de la obligada foto en el túnel en donde se corre "el gran premio de Mónaco" de Formula 1 llegamos a las playas.

En principio el agua estaba más fria de lo que esperabamos, pero al rato nos acostrumbramos y fue un placer.

Ya encarando la vuelta, nos detuvimos un rato en la avenida de la costanera a admirar los autos que pasaban. Los más barato y comunes que vimos fueron los Porsche 911, que hay a montones, así que imginensé (los que entienden un poco de autos de lujo) lo que era eso.

miércoles, 19 de septiembre de 2007

Día 7 - Descanso y Viaje

Este día estaba programado para viajar y descansar los musculos luego de tanto caminar.
Salimos temprano en tren hacia Niza y la bella Costa Azul.

En la mitad del recorrido pasamos de España a Francia, y rápidamente nos dimos cuenta, ya que en el último pueblito de frontera cambió el personal del tren y por los parlantes nos dieron la bienvenida (sólo en Francés) que, por supuesto, no entendimos una palabra. Como hablaron un rato largo, sólo rogabamos que no esten informando algún cambio de tren, o algo por el estilo.... finalmente llegamos ok a destino... solo nos quedo la duda sobre que miércoles habrán dicho.

A mitad de camino haciamos combinacion en Montpellier. Aquí, como teniamos dos horas de espera, salimos a caminar por el centro, que estaba próximo a la estación. Sacamos algunas fotos y comenzamos a tomar contacto con la Galia.


Llegada a Niza de noche y, como había visto un mapita en Internet que era fácil llegar al hotel, no lo imprimí. Grave error. Ahora sabemos que no es lo mismo una ciudad vista desde la pantalla de una PC que estando fisicamente allí. Por suerte preguntamos en un inglo- franco- castellano- cocoliche a un conserje de un hotel cuatro estrellas y este era mexicano, asi que con mucha onda nos imprimió un mapita y llegamos rápidamente a destino. Estabamos a dos cuadras.

Finalmente vuelta de reconocimiento por Niza y a averiguar como visitar Mónaco al otro día.

martes, 18 de septiembre de 2007

Día 6 - Rambla, mas Gaudí y Montjuic

Ultimo día catalán. Primero caminamos por la famosa "Rambla", perdiéndonos nuevamente en el Barrio Gótico con sus angostísimas callejuelas. Luego a Montjuic para admirar toda la ciudad desde las alturas y sacar fotos panorámicas.

Bajamos con el funicular y a visitar la Pedrera. Un edificio de oficinas y departamentos de 4 o 5 pisos realizado por Gaudí sin ninguna línea recta en ninguna pared ni exterior ni interior. Ni en techo ni en paredes.

Con las poca fuerza muscular que nos quedaba, llegamos al hotel agotados. Nos habian dicho: "caminen mucho, que es la mejor forma de conocer las ciudades de Europa".

Me parece que estamos cumpliendo demasiado dicha recomendación.

lunes, 17 de septiembre de 2007

Día 5 - Fútbol y Religión

Otro día sin una nube, y con mucho calor.

Luego de un buen desayuno fuimos a visitar el otro estadio de fútbol que teníamos previsto. El del Barcelona de Messi (en Europa, cada vez que decimos "argentinos" no nos dicen más "Maradona", nos dicen "eh, Messi, Messi") El tour fue similar al del Real Madrid, aunque con un estadio no tan moderno. Ese mismo día elegían el proyecto para su remodelación.

Luego, mas Gaudí. Ahora era el turno del Templo de la Sagrada Familia. Realmene indescriptible... el tipo estaba muy loco realmente. Recomiendo que busquen en Google información (o entren al link hice) y vean algunas fotos para conocer esta obra realmente monumental.

Ya bastantes cansados, igualmente decidimos ir caminando hasta el hotel (como 40 cuadras) para seguir conociendo Barcelona. En el camino pasamos por la Casa Milá (Pedrera, que visitamos al día siguiente) y por la casa Batllo (ambas obras de Gaudí).


Luego de un día con mas de 100 cuadras caminando, llegamos arrastrandonos al hotel... y pudimos descansar.

domingo, 16 de septiembre de 2007

Día 4 - Barceloneando

Barcelona nos pareció, rápidamente, una buen lugar para vivir. Relativamente tranquila, ordenada, limpia, con lindas playas, muchas bicis andando en sus respectivas bicisendas (hay por todos lados), automovilistas respetuosos y con gente agradable. Un poco difícil de entender el catalán, idioma predominante en carteles y publicidad pero no en el hablar cotidiano.

Aqui el itinerario comenzó con un buen chapuzón en el mar. El día era ideal (30 grados) y mucho sol. Nos sorprendió la claridad y transparencia del agua, a pesar de la cercanía de las plazas con el centro y puerto de la ciudad.


De ahí, ya fresquitos, bus a Park Guell. Una gran obra de arte al aire libre de Antoni Gaudí. Realmente impresionante. Originariamente iba a ser una ciudad-jardín (tipo Country de hoy) pero con la espectacular y excéntrica arquitectura de Gaudí. Finalmente el proyecto quedó por la mitad por la quiebra de Guell (el que ponía la guita). Lo que quedó, es realmente admirable.


Por último, luego de la cena, paseo por la Rambla y el Barrio Gótico.